Alergia a los Fármacos - Resumen
Las reacciones adversas a los medicamentos son habituales. Sin embargo, todas las personas responden de manera diferente. Una persona puede desarrollar un eccema u otras reacciones al tomar un determinado medicamento, mientras que otra persona que esté tomando el mismo fármaco puede no tener ninguna reacción adversa.
Solo entre un 5 y un 10% de estas reacciones se deben a una alergia al medicamento.
La reacción alérgica se produce cuando el sistema inmunológico sobrerreacciona a una sustancia inofensiva, en este caso es un medicamento el que desencadena una reacción alérgica. La sensibilidad a los fármacos puede producir síntomas similares, pero no comprometer al sistema inmunológico.
Ciertos medicamentos tienen más probabilidad de producir reacciones alérgicas que otros. Los más comunes son:
• Antibióticos, como la penicilina
• Aspirina y medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno
• Anticonvulsivos
• Tratamiento con anticuerpos monoclonales
• Quimioterapia
Las posibilidades de desarrollar una alergia son más elevadas cuando se toma el medicamento con frecuencia o cuando se refriega sobre la piel o se aplica en inyección, como en el caso de la vía oral.
El alergista/inmunólogo tiene la capacitación especializada y la experiencia para diagnosticar, con precisión, una alergia a un fármaco y brindar alivio a sus síntomas. El servicio “Encuentre un Alergista/Inmunólogo” de la AAAAI es un recurso de confianza para ayudarlo a encontrar un especialista cerca de su hogar.
Biblioteca de condiciones (Conditions Library)
Encuesta sobre la hipersensibilidad a los medicamentos (Drug Allergy Quiz)
Alergia a los Fármacos – Síntomas y diagnóstico
Síntomas
Las reacciones adversas a los medicamentos van desde vómitos y pérdida de cabello, en el caso de la quimioterapia, hasta molestias estomacales producidas por la aspirina o diarrea producida por los antibióticos. Si se ingieren inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina ACE para presión arterial elevada, puede presentarse tos o inflamación del rostro y de la lengua.
En muchos casos, puede ser difícil determinar si la reacción se debe al medicamento o a otro motivo. Ello se debe a que los síntomas pueden ser similares a los de otras afecciones.
Los tipos más frecuentes de síntomas alérgicos a los medicamentos son:
• Eccema cutáneo, en especial, ronchas
• Picazón
• Problemas respiratorios
• Inflamación, por ejemplo, en el rostro
La anafilaxia es una respuesta alérgica grave que a menudo produce inflamación, ronchas, presión arterial baja, y, en los casos graves, un choque anafiláctico. Si no se trata el choque anafiláctico de inmediato, puede ser fatal.
Una gran diferencia entre la anafilaxia y otras reacciones anafilácticas es que la anafilaxia generalmente compromete a más de un sistema del cuerpo.
La anafilaxia requiere atención médica inmediata porque puede ser fatal. Si cree que puede ser alérgico a un medicamento recetado por su médico, llame a su doctor antes de modificar o suspender la dosis.
Diagnóstico
El médico querrá saber:
• Cuándo comenzaron los síntomas
• Descripción de los síntomas
• Duración de los síntomas
• Otros medicamentos tomados durante este tiempo, incluso fármacos de venta libre
Si tiene antecedentes de reacciones a diferentes medicamentos, o si tiene una reacción grave a un fármaco, un alergista/inmunólogo, a menudo llamado alergista, está capacitado y tiene experiencia para diagnosticar el problema y ayudarlo a desarrollar un plan para protegerlo en el futuro.
Alergia a los Fármacos – Tratamiento y administración
Si tiene efectos colaterales que le preocupan, o si sospecha que se ha producido una alergia a los fármacos, llame a su médico. Si los síntomas son graves, busque ayuda médica de inmediato. Una reacción anafiláctica grave requiere atención médica inmediata porque el resultado puede ser fatal. En la mayoría de las reacciones adversas, su médico podrá recetar un medicamento alternativo. Para las reacciones graves, su doctor podrá recetar antihistamínicos, corticoesteroides o epinefrina.
Cuando no hay una alternativa disponible y el medicamento es esencial, puede ser recomendable un procedimiento de desensibilización al medicamento. Esto implica incorporar el medicamento, de manera gradual, en pequeñas dosis hasta que se logre la dosis terapéutica.
Asegúrese de que su médico, dentista y farmacéutico estén informados sobre sus alergias a los fármacos. Esto ayudará a determinar qué medicamentos se deben evitar.